Las personas con enfermedades crónicas presentan un mayor número de trastornos mentales o síntomas que condicionan su calidad de vida. Factores como la edad, el pronóstico y la evolución además de los recursos sociales, sanitarios y familiares pueden determinar de manera significativa el nivel de salud mental y bienestar de los pacientes.
El vivir con una enfermedad crónica diagnosticada requiere cambios, por tiempo indefinido, en el modo de vida de las personas afectadas en términos de cuidado de su propia salud. Son muchos los factores que entran en el saco a la hora de abordar adecuadamente las enfermedades crónicas y los siguientes factores intervienen y determinan la atención a las enfermedades crónicas y a la salud mental de los pacientes:
- Pacientes con pluripatologías: ocurren cambios en los perfiles de los pacientes ya que en general las enfermedades crónicas aumentan y su abordaje puede resultar en ocasiones complejo.
- Cuidados y atención integral: se concibe como la necesidad de atención social y sanitaria de manera simultánea y complementaria. También la necesidad de encontrar un nuevo marco conceptual de la atención social y sanitaria.
- Cambios sociológicos: Aumento de la esperanza de vida, envejecimiento de la población, globalización, movilidad geográfica, etc.
La ciencia y la medicina han logrado grandes progresos en el desarrollo de tratamientos eficaces para los síntomas de las enfermedades crónicas. Aun así, muchos pacientes se enfrentan diariamente al deterioro de la salud mental y emocional como consecuencia de esa enfermedad crónica que padecen. Uno de los mayores temores es la incertidumbre asociada a una enfermedad crónica. La enfermedad puede ser esporádica y durar solo un breve periodo de tiempo o puede ser permanente e ir empeorando gradualmente con el paso del tiempo.
A consecuencia de esto, el paciente puede enfrentar nuevas limitaciones y es posible que en ocasiones se sienta ansioso por ver los resultados del tratamiento que está tomando. Puede llegar a ser difícil adaptarse a una nueva realidad y hacer frente a estos cambios. Con el paso del tiempo, esta incertidumbre puede desencadenar en pensamientos negativos que aumentan la ansiedad y tristeza, y que en ocasiones pueden llevar a la depresión.
¿Existe relación entre salud mental y la enfermedad crónica?
Los resultados de un reciente estudio sobre el impacto emocional de la enfermedad crónica en el que han participado 541 pacientes han determinado que en torno al 70% de los pacientes que viven con enfermedades cronicas experimentan síntomas depresivos debido a su enfermedad como por ejemplo:
- Cansancio
- Fatiga
- Tristeza
- Problemas de sueño
- Apatia
Además, la depresión se experimenta en un 48% de los casos. Otros síntomas asociados al impacto emocional de la enfermedad crónica son el estrés, ansiedad, miedo y angustia.
Las personas con enfermedades relacionadas con la salud mental presentan un riesgo tres veces mayor de no adherirse al tratamiento médico asociado a la enfermedad crónica no contagiosa.
Impacto en los pacientes
Las dificultades y limitaciones que experimentan a lo largo del avance de la enfermedad explican
en gran medida la intensidad del impacto emocional. Entre ellas se destacan:
- No poder llevar la misma vida que antes de la enfermedad
- No poder concentrarse
- Trabajo
- Estudios
- Hacer las tareas domésticas
- Relacionarse con otras personas
- Independencia
Los entimientos, pensamientos y situaciones de impacto negativo son muy frecuentes y variados. Causan especial impacto los relacionados con las relaciones sociales ya que este punto es un aspecto esencial en la vida de las personas. Podemos destacar el salir cada vez menos, sentirse aislado, disminuir el contacto con amigos o la irritabilidad con la familia.
Aparte del impacto social, ya hemos destacado el impacto psicológico. Solo el 55% de los pacientes encuestados ha decidido recibir atención psicológica o psiquiátrica al menos en algún momento, por problemas relacionados con su enfermedad crónica.
La situación vivida por la pandemia de Covid-19, ha empeorado la salud mental de las personas que padecen enfermedades crónicas, añadiendo factores nuevos de impacto negativo a los específicos de la enfermedad y pudiendo llegar a agravar estos últimos.
Recomendaciones
Todos los cambios que se producen debido al diagnóstico de la enfermedad crónica deben de ser tomados en cuenta. La OMS ha publicado recientemente una guía de como cuidar nuestra salud mental. En caso de que usted o un familiar suyo está experimentando síntomas de deterioro de su salud mental, por favor contacte con su médico para poder abordarlo de forma personalizada y directa. Se puede prevenir:
- Trabajando en la inteligencia emocional de mano de los profesionales.
- Practicando ejercicio dentro de las posibilidades de cada paciente
- Siguiendo una dieta sana y equilibrada
- Dentro de las posibilidades de cada paciente, procurar tener una vida social activa y poder practicar hobbies. Es necesario no aislarse.
Establecer una rutina y tener una buena salud del sueño.
Encontrar ayuda
Si sientes que debes hablar con un profesional, te recomendamos acudir a tu medico y contarle lo que estas sintiendo. Te dejamos una lista de asociaciones a las que tambien puedes pedir ayuda:
